sábado, 30 de octubre de 2010

Actitudes violentas del agresor


Físicas

  • Empujones.
  • Arañazos.
  • Puntapiés.
  • Bofetadas.
  • Puñetazos.
  • Mordeduras.
  • Estrangulamiento.
  • Agresiones con armas.
Violencia emocional
  • Insultos.
  • Gritos
  • Amenazas.
  • Intimidaciones.
  • Castigos.
  • Sometimiento.
  • Chantajes.
Violencia sexual
El tipo más frecuente de esta agresión es la llamada violación por confianza, sucede cuando la pareja es presionada a tener actividad sexual; luego de insinuaciones, chantajes y amenazas, finalmente la pareja logra que acepte sostener relaciones sexuales con ella, aún en contra de sus deseos.

Otros comportamientos que son signo de que tu pareja esta siendo violenta son:
  • Revisa tus pertenencias, tu diario, celular o correo electrónico para conocer "la verdad".
  • Vigila, critica o pretende que cambies tu manera de vestir, de peinarte, de maquillarse (para la mujer), de hablar o de comportarte.
  • Presiona para que hagas dietas o ejercicio.
  • Te hace sentir menos al compararte con otras personas.
  • Te prohíbe, amenaza o manipula con respecto a los estudios, el trabajo, las costumbres, las actividades o las relaciones que desarrollas.

Consecuencias

  • Depresión que te puede llevar e pensar en el suicidio.
  • Aislamiento.
  • Fracaso escolar o deficiente rendimiento laboral.
  • Trastornos en la alimentación.
  • Trastorno en el sueño.
  • Adicción.
  • Embarazos no deseados.
  • Infecciones de transmisión sexual.
  • Agresiones físicas que pueden atentar contra tú salud física y emocional.
Esta en nosotros detenerla. DENUNCIA y no te calles!

Como detectar si sufro de violencia en mi noviazgo?



Para saber si tu relación es violenta simplemente debes analizar como te sientes cuando estas a su lado; es decir te sientes libre de comentar o hacer cualquier cosa, o tienes que cuidarte de tus comentarios y comportamientos porque temes que en cualquier momento se enoje y sepoga agresivo(a).

Otra forma es analizar si en tu relación se encuentran ciertos comportamientos que normalmente se repiten, por ejemplo:

1 etapa: Tu pareja se tensa constantemente, su tensión se acumula y crece tanto que insulta y reprocha.
2 etapa: Te agrede física y/o emocionalmente sin poder controlarse.
3 etapa: Busca la reconciliación, dice arrepentirse, promete que va a cambiar y te llena de obsequios y se muestra muy complaciente.

Cuando este ciclo sucede más de una vez en la relación o la pareja tiene episodios de agresión que aparecen de la nada, se esta ante un caso de violencia que debe ser detenido y atendido.

sábado, 9 de octubre de 2010


Abuso sexual infantil.

De manera genérica, se considera abuso sexual infantil o pederastia1 a toda conducta en la que un menor es utilizado como objeto sexual por parte de otra persona con la que mantiene una relación de desigualdad, ya sea en cuanto a la edad, la madurez o el poder. Se trata de un problema universal que está presente, de una u otra manera, en todas las culturas y sociedades y que constituye un complejo fenómeno resultante de una combinación de factores individuales, familiares y sociales. Supone una interferencia en el desarrollo evolutivo del niño y puede dejar unas secuelas que no siempre remiten con el paso del tiempo.

El abuso sexual constituye una experiencia traumática y es vivido por la víctima como un atentado contra su integridad física y psicológica, y no tanto contra su sexo, por lo que constituye una forma más de victimización en la infancia, con secuelas parcialmente similares a las generadas en casos de maltrato físico, abandono emocional, etc. Si la víctima no recibe un tratamiento psicológico adecuado, el malestar puede continuar incluso en la edad adulta.

En su mayoría, los abusadores son varones (entre un 80 y un 95% de los casos) heterosexuales que utilizan la confianza y familiaridad, y el engaño y la sorpresa, como estrategias más frecuentes para someter a la víctima. La media de edad de la víctima ronda entre los 8 y 12 años (edades en las que se producen un tercio de todas las agresiones sexuales). El número de niñas que sufren abusos es entre 1,5 y 3 veces mayor que el de niños.

Los niños con mayor riesgo de ser objeto de abusos son:

aquellos que presentan una capacidad reducida para resistirse o para categorizar o identificar correctamente lo que están sufriendo, como es el caso de los niños que todavía no hablan y los que tienen retrasos del desarrollo y minusvalías físicas y psíquicas;

aquellos que forman parte de familias desorganizadas o reconstituidas, especialmente los que padecen falta de afecto que, inicialmente, pueden sentirse halagados con las atenciones del abusador;

aquellos en edad prépuber con claras muestras de desarrollo sexual;

aquellos que son, también, víctimas de malos tratos.

Según un cálculo de las llamadas «cifras ocultas», entre el 5 y el 10% de los varones han sido objeto en su infancia de abusos sexuales y, de ellos, aproximadamente la mitad ha sufrido un único abuso.